YEMANYÁ, SUS 3 ORACIONES MAS PODEROSAS Y MÁGICAS

ORACIÓN A YEMANYÁ PARA PARA PEDIRLE PROTECCIÓN Y HACER UNA PETICIÓN

Tu que después de Dios
gobiernas las aguas derramando
sobre la humanidad tu protección,
realizando, ¡oh Divina Madre!
una descarga en sus cuerpos y en sus mentes,
limpiando las aguas
e infundiendo en sus corazones
el respeto y la veneración.



Debida a esa fuerza de la naturaleza
que tu bellamente simbolizas,
permite que vuestras falanges
nos protejan y amparen.

Te suplicamos Yemanyá, poderosísima,
Reina de las Aguas, este ruego a conseguir.

(Hacer ahora la Petición)

Con todo amor y justicia dame
la precisa fuerza necesaria
para todo soportar,
en un mar de naturaleza y armonía
quiero llevar una vida digna.

Protege a mis seres queridos
de todos los males y peligros.

Salve Yemanyá, Reina del Mar.

ORACIÓN A YEMANYA PARA
LIMPIA DE NEGATIVIDAD Y DE MALES
CAUSADOS POR ENEMIGOS

Madre y Reina que gobiernas las aguas,
derramad sobre mi tu protección,
haciendo así, oh divina Madre,
una descarga en que limpie mi cuerpo,
que limpie mi aura
y que llene mi corazón de amor,
por ti y por mis semejantes.

Con la veneración debida te pido Madre y Reina mía
que saques de mi vida todo mal que me aceche,
que me libres de enemigos y persecuciones,
no dejes Señora, que me miren con malos ojos,
que con malos pensamientos corten mi energía,
que las malas lenguas me difamen,
y que yo sea vencido por quien me desee
cualquier tipo de mal o desgracia.

Cúbreme con tu azul manto, Reina del Mar,
purifícame con la sal de tus aguas,
báñame con tu espuma vivificante.

¡Salve Yemanyá!

Que sea tu poder y tu fuerza
el que me devuelva el bienestar,
la salud y la prosperidad,
quedando así yo libre de todo mal,
hechizos y encantamientos.

¡Salve Reina de los Mares!.


ORACIÓN A YEMANYÁ PARA PEDIR POR LAS NECESIDADES DIARIAS Y EL PROGRESO

Yemanyá, Madre del Mundo,
Fuerza que mantiene la creación,
Señora de todos los bienes,
Aliento de la vida misma.

Magnánima Madre de todas las madres,
el mar es tu símbolo, la sal es tu marca.
Tu protección es la lactancia eterna.

Ayúdame Madre mía.

Provéeme para las necesidades diarias,
que no le falte el pan ni la vivienda digna
a mis hijos, a mi familia, a mis hermanos.

Que no me falte el trabajo digno,
y que no nos llegue la enfermedad.

Yemanya, Querida Madre,
Ayúdame con tu constancia,
sembrando el deseo para perseverar
en el amor a nuestro Padre Olofin.

Odoiá Yemanja.
 

A Yemanyá le gusta que se le ofrendan productos bellos del mar, como son conchas, caracolas marinas, corales...

 

Sus velas han de ser de color azul celeste y blanco. Para ofrecerle flores se consiguen 7 claveles blancos que se atan con un lazo azul y se arrojan al mar en su honor.

Yemayá es una deidad fluvial, que posteriormente se convierte en dueña de las aguas y simbolización del mar, elemento clave de la vida; es como una Afrodita que nace del mar y que emana vida de manera matriarcal. Pero su vertiente es decididamente de madre, justiciera y protectora de los suyos, madre amorosa que cuida a todos sus hijos, también del resto de los Orishas.

Como la Hera griega, reina madre universal, firme ante el varón dominante, extraordinariamente dura y colérica frente a la desobediencia. En sus diferentes vías de presencia puede ser la más anciana de los Orishas, vigilante de los ríos, lagos, manantiales límpidos y claros, aunque también de las aguas residuales, que presagian muerte. Está presente en la espuma de mar que levantan los barcos, por lo que es benefactora de la pesca y la navegación marina, también de los riachuelos boscosos y selváticos; y es la diosa de las profundidades abisales del mar, lo que le otorga una presencia benefactora pero también oscura y mística.

Es un Orisha primordial, presente con las misma forma en las religiones de origen africano.

Tras la celebración el 8 de septiembre de la festividad de Nuestra Señora de la Virgen de Regla, patrona del puerto de San Cristóbal de La Habana, está presente la imagen negra de la Orisha Yemayá, sincretizándose también en la figura mariana de la Virgen de Regla del sur de España por la deidad yoruba.