PERRITO DE LAS PRADERAS, TOTEMS DE ANIMALES MEDICINA

 
Ningún otro animal, salvo quizás el lobo, ejemplifica mejor la idea de comunidad que el perrito de las praderas, cuyas colonias bullen siempre de actividad.
 
El perrito de las praderas pertenece a la familia de la ardilla, y tiene dos subespecies: el de cola negra, que vive predominantemente en las llanuras y es el más común, y el de cola blanca, que vive en las montañas y no es tan sociable.
 
Los perritos de las praderas construyen verdaderas ciudades, con toda una red de túneles, madrigueras y cámaras individuales que se reparten entre diversas comunidades grupales o «clanes», cuyos miembros dependen unos de otros. La tierra extraída cuando construyen sus túneles la acumulan formando un montículo en la entrada de la colonia, tras lo cual corta todas las plantas de los alrededores para disponer de un campo de visión despejado que permita a los vigías detectar la proximidad de los depredadores y dar la voz de alarma con unos agudos chillidos.

 

Su principal depredador es el turón patinegro americano, que se extinguió en estado salvaje y desde hace tres décadas se está intentando reintroducir de nuevo en las praderas, aunque con un éxito limitado. Debido a ello, sus principales depredadores en la actualidad son los búhos y las serpientes, que convendría que estudiaran todos los que tengan al perrito de las praderas como tótem.
 
Los perritos de las praderas comen hierbas y plantas, y rara vez beben agua, pues se hidratan con las plantas que comen, y en invierno subsisten principalmente de la grasa acumulada durante el verano. Todo esto me lleva a sugerir a las personas que tienen al perrito de las praderas como tótem que lleven una dieta muy rica en verduras, pues quizás el agua no sea tan importante para ellas como el consumo regular de gran cantidad de verduras frescas.
 
Por otra parte, es muy posible que estas personas sean demasiado sensibles a la luz y tengan que utilizar gafas de sol con frecuencia, dado que los perritos de las praderas tienen en los ojos unas lentes de color naranja con las cuales filtran buena parte del resplandor del sol y les permite tomar el sol con frecuencia.
 
Los perritos de las praderas son, evidentemente, unos animales muy sociables a los que les encantan las muestras de afecto, hasta el punto que se abrazan e incluso se besan entre ellos abriendo la boca y tocándose los dientes. De modo que, si te ha aparecido un perrito de las praderas como tótem, examina tus costumbres sociales.
 
¿Sois sociables tú y las personas que te rodean? ¿O sois poco sociables? ¿Estás intentando apartarte del mundo cuando deberías relacionarte más? ¿Deberías ser más afectuoso de lo que has sido hasta ahora?
 
También evalúa tu sentido de comunidad, sea a nivel familiar, laboral o social. ¿Estás participando activamente? ¿Lo hacen los demás? ¿Todavía no has aprendido a convivir con los demás, compartiendo cada uno sus responsabilidades?
 
El perrito de las praderas anuncia que se van a dar cambios en tu percepción de la vida social y del papel que juegas en la comunidad; lecciones que se pueden prolongar a lo largo de cinco a siete años, dado que esta es la esperanza de vida de estos animales.
 
Por otra parte, dado que los perritos de las praderas son animales excavadores, es muy posible que, cuando te aparezcan como tótem, sientas la necesidad de valorar hasta qué punto deberías excavar en diferentes aspectos de tu vida. ¿Deberías implicarte más en la vida de la gente que te rodea? ¿O bien te has involucrado demasiado?
 
Aunque muchas personas creen que los perritos de las praderas son una plaga habría que eliminar, en realidad cumplen una valiosa función en el equilibrio natural: con sus excavaciones airean el suelo, favoreciendo así el crecimiento de las plantas y sus madrigueras permiten que se acumule más humedad bajo la superficie.
 
Cuando el perrito de las praderas aparece en la vida de una persona, anuncia normalmente que ha llegado el momento de implicarse de un modo más activo en la sociedad.
 
Recuerda que los cambios son necesarios, de modo que involúcrate y no dejes que los demás te disuadan de participar.
 
  

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